ELISEO NO
MINTIÓ AL DECIRLE A BENADAD QUE NO MORIRÍA DE SU ENFERMEDAD
He
oído de otros ( Scío ), la explicación de este
versículo, y me parece correcta. La consulta de Benadad, fue que
sí sanaría de su enfermedad y es eso lo que Eliseo le responde.
El profeta, de parte de Dios, le contesta que sí , que iba a sanar,
porque era verdad que iba a sanar, era verdad que no moriría de esa
enfermedad; aunque Benadad parece haberse sentido muy mal y débil cuando
se decide a consultar a Dios. No obstante, Dios le revela a Eliseo que el rey
Benadad moriría; no de la enfermedad, sino asesinado por su propio
siervo Hazael, que le sucedió en el trono.
"Y Eliseo le dijo: Ve,
díle: Seguramente vivirás. Empero Jehová me ha mostrado
que él ha de morir ciertamente." ( II R 8: 10 )
"El día siguiente
tomó un paño basto y metiolo en agua y tendiolo sobre el rostro
de Benadad y murió, y reinó Hazael en su lugar." ( II R
8: 15 )
Por
lo dicho en el versículo 15 se colige que Hazael, cegado por la
ambición despertada en él por la profecía de Eliseo, no
quiso esperar su tiempo, sino que asesinó a su amigo el rey. No
obstante, para no dejar marcas y que se atribuyese su muerte a la enfermedad,
lo ahogó, lo sofocó. Cogió un paño grueso, (como
una frazada o cobija, por ejemplo) y lo empapó en agua para impedir que
el aire pasara a través, aplicándoselo luego en la cara al
enfermo, hasta que lo ahogó.
En
forma parecida algunas madres desnaturalizadas ahogan a sus pequeños
aplicándoles una almohada al rostro. En aquella época, en que no
había autopsia, el asesinato pudo pasar inadvertido para la corte;
máxime que se esperaba la muerte del enfermo.
Así
que Eliseo no le mintió a Benadad. Este le envió a preguntar:
"¿Tengo de sanar de esta enfermedad?", y eso es lo que Eliseo
le contestó. Lo otro que él sabía, que moriría
asesinado, no se lo dijo.
Es
llamativo ver cómo cuando Dios le hace conocer al humano que le espera
una cierta labor o dignidad, éste en vez de esperar por Él, se
mete a "ayudarlo" y echa a perder la cosa. Algo similar le
ocurrió a Moisés cuando salió a hacer justicia a favor de
los hebreos cuando él tenía 40 años de edad.