LA SAL ES USADA POR EL
SEÑOR COMO EJEMPLO DE SABOR, NO DE PRESERVACIÓN.
Hay
predicadores que piensan que el uso del ejemplo de la sal por parte de
Jesucristo, fue debido a la cualidad que tiene este producto de preservar las
carnes. Jesús nunca usó esta parábola basándose
en la cualidad preservante de la sal, sino basado en su sabor y en el hecho
de poder ser usada como sazón. Para pensar así me baso en el
hecho de que Jesús menciona su sabor, no su cualidad preservante. Aunque
este no es un error doctrinal, siempre es bueno hacer prevalecer la verdad.
Esta
parábola aparece solamente tres veces en la Biblia, y en las tres veces
que aparece se usa referente a su sabor, a su cualidad de sazonar, nunca
aparece referente a su cualidad de preservar las carnes. Vamos a leer Mt 5: 13;
Mr 9: 50 y Lc 14: 34.
"Vosotros
sois la sal de la tierra; y si la sal se desvaneciere ¿con qué
será salada? no vale más para nada, sino para ser echada
fuera y hollada de los hombres." (Mt 5:13 )
En
este versículo se ve que si la sal se desvaneciera, la pregunta a
hacerse sería ¿con qué será salada? No se dice
"con que otra cosa preservaremos". Es decir, que la
preocupación se centra en su sabor. Con más claridad aún
aparece en Mr 9: 50, donde incluso se mencionan las palabras
"desabrida", que solamente se usa para hablar de sabores, no de
preservación, y la palabra "adobaréis" que se usa para
hablar de sazonar, no de preservar.
"Buena
es la sal, mas si la sal fuere desabrida, ¿con qué la
adobaréis? Tened en vosotros mismos sal; y tened paz los unos con
los otros." ( Mr 9: 50 )
En
el versículo que acabamos de leer está aún más
claro que en la cualidad de la sal en que la parábola se enfoca, no es
su poder preservante, sino su cualidad de sazonar y dar sabor. Esto se ve
evidentemente cuando se mencionan las palabras "desabrida" y
"adobaréis", que se refieren solamente al sabor y no al poder
preservante.
Otro
tanto ocurre con Lc 14: 34. Allí también las palabras
"desvanecida" y "adobará" se refieren únicamente
a la cualidad sazonadora de la sal y no a su poder de preservar las carnes.
"Buena es la sal; mas si aun la
sal fuere desvanecida, ¿con qué se adobará?"
(Lc 14: 34)
Por
los ejemplos anteriormente mencionados es por lo que se ve que en la
parábola, la sal no se usa con el significado de elemento preservante,
sino con el significado de elemento que da sabor. Por lo tanto, no se debe
desvirtuar la intención de la parábola del Señor,
dándole otro significado diferente al que él le dio.