¿Qué
entendemos en la Biblia por la palabra "ley"?
En las conversaciones relativas a la
Biblia, la palabra
ley
se refiere a las leyes de Dios.
Recordemos que las leyes no las originó
Moisés, ni
Noé, ni ninguno de los
profetas, sino Dios
personalmente.
En la Biblia hay dos grandes
grupos de leyes. Están las leyes rituales, y las leyes de
comportamiento. Las leyes
rituales, como su nombre lo
indica, se referían a los
ritos, sacrificios y ceremonias
que pre-figuraban varias cosas:
la misión de Jesucristo,
cuando vino a morir por nosotros,
la venida del Espíritu
Santo, la Segunda
Venida,
etc..
Las principales leyes rituales eran las que tenían que ver con el
Templo, y con los sacrificios que en él se
hacían. También
eran leyes rituales la
circuncisión, los lavamientos
del cuerpo para no contaminar el santuario
terrenal, que era símil del Santuario del
Cielo, la presentación de los primogénitos
humanos, el sacrificio de los
primogénitos de animales,
etc..
Las leyes de comportamiento
son las que Dios estableció para que el humano supiera cómo
tenía que comportarse con Dios y con su
prójimo. Ejemplos de ellas son los Diez
Mandamientos, las leyes que nos enseñan cómo comportarnos con
los extranjeros, con nuestros
enemigos, con las viudas y los
huérfanos, con los
pobres, con aquellas cosas que se le perdieran a alguien y nosotros
nos las encontráramos,
los daños que hacemos sin
querer, o los que hacemos por
irresponsables,
etc..
¿Qué
significa "estar bajo la ley"?
La frase estar bajo
la ley es una de esas que
sirven de comodín. La
mayoría de las veces nadie las
define, sólo las
pronuncian. Por lo regular se
le aplica a aquellas personas que consideran que los pecados que en el Antiguo
Testamento se describen como
prohibidos, están también prohibidos para los
cristianos.
Sin embargo, en la
Biblia, la frase no
estar bajo la ley significa
generalmente que,
para ser salvos, no tenemos que cumplir
con la circuncisión, los sacrificios de corderos, y demás ritos.
Pero hay cristianos que,
erradamente, consideran que con esa frase lo que se quiere decir es que
el cristiano no tiene que cumplir los mandamientos de
Dios.
¿Es esto
cierto?
¿Quiere eso decir que no
estamos todos bajo las leyes de comportamiento que Dios
estableció?
¿Quiere eso decir acaso que ya
podemos calumniar, adorar imágenes, adulterar, robar, matar, consultar
a los muertos, etc.?
¡Claro que
no!
Entonces, ¿por qué
dicen que no estamos bajo la ley?
Si al decir que no estamos
bajo la ley, se refieren a que no estamos bajo la ley ritual, eso es
correcto. Es decir, que si
lo que significa esa frase es que para salvarnos no tenemos que
circuncidarnos, ni sacrificar
animales, ni nada de
eso, entonces está
correctamente usada la frase;
pero si la usan significando que podemos cometer todo tipo de pecado sin
que eso se nos tenga en cuenta,
entonces es una espantosa
falsedad, una horrible y
satánica herejía.
¿Qué
significa "no estar bajo la ley"?
Es muy corriente en las conversaciones entre hermanos que hablan sobre
las leyes de Dios, oír
a algunos decir no estamos
bajo la ley. Eso depende
de a qué leyes se refiera,
como antes aclaré. Si habla
de las rituales, está en
lo correcto. Si se refiere a las
leyes de Dios para el comportamiento
humano, se halla en un espantoso
error. El haberse convertido a Cristo
no es una patente de corso para hacer cada uno lo que le dé la gana,
y seguir pensando que está salvado. (Patente de corso era una
licencia que daban los gobiernos para practicar el piratería contra
los barcos enemigos.)
Conozco personalmente el triste caso de un hombre que dice que debido
a que no estamos bajo la ley,
el cristiano puede acostarse con la mujer
ajena, puede ser
homosexual, puede
estafar,
etc., y seguir siendo
salvo.
Basándose en I Jn
3:9 él considera que una
vez que una persona se convierte a
Cristo, ya no puede pecar.
Pero no porque la persona lo evite con la ayuda
divina, sino porque según
él, cuando el inconverso se acuesta con la mujer del
vecino, comete un
adulterio, y por ese pecado va
a parar al Infierno. No
obstante, según
él, cuando el que se acuesta
con la mujer del vecino es un
cristiano, eso no es
adulterio, porque él no
está bajo la ley como sí lo está el
inconverso.
¡¡Espantoso!!
¡¡Asqueroso!!
¡¡Satánico!!