Melquísedec no
pudo ser Cristo
Cuando una persona alega
una hipótesis, o hace cualquier afirmación que no sea evidente, no es el oyente
el que tiene que demostrarle que eso es falso, es el que plantea la
hipótesis o hace la afirmación el que tiene que demostrar que eso es cierto.
El hecho de que nadie pueda demostrar que lo que se afirma es falso, no es una
prueba de que lo que se afirma es cierto. Yo puedo decir que anoche fui a la
luna y regresé esta mañana, y nadie puede demostrarme que es falso. Soy yo el
que tengo que demostrar que lo que digo es cierto. Yo puedo también afirmar que
mi burro sabe volar, pero que no le gusta hacerlo delante de otras personas.
Nadie puede probarme que es falso, soy yo el que tengo que demostrar que es
cierto.
Igualmente sucede con las hipótesis bíblicas, o cualquier
otra afirmación que no sea evidente con la sola lectura de la Escritura. No
soy yo el que tengo que demostrar que es falsa, es el que plantea tal hipótesis
o hace tal afirmación el que tiene que demostrar que es cierta.
Yo no sé en que se basan los que opinan que Melquísedec es
el mismo Jesucristo. No debía ser yo el que tuviera que demostrar que esa
hipótesis está errada. Los que la plantean debían ser los que demostraran que
es cierta. No obstante voy a demostrar que esa hipótesis es errada. Si alguien
ve un error en lo que yo considero mi demostración, o si alguien puede
demostrarme que Cristo y Melquísedec son la misma persona, por favor compártalo
conmigo, me hará un gran favor, porque a mí me gusta encontrar la verdad.
En la Biblia sólo hay cinco pasajes donde se habla de
Melquísedec, estos son: Gn 14: 18-20; Sal 110: 1-7; Heb 5: 5-11; Heb 6: 19-20;
y Heb 7: 1-28. De ninguno de esos pasajes se puede sacar en consecuencia que
Cristo sea Melquísedec. Veamos.
"Entonces Melquísedec, rey de Salem, sacó pan y vino;
el cual era sacerdote del Dios
alto; y bendíjole, y dijo:
Bendito sea Abram del Dios Alto,
poseedor de los cielos y de
la Tierra; y bendito sea el Dios Alto,
que entregó tus
enemigos en tu mano. Y diole
Abram los diezmos
de todo."
( Gn 14: 18-20 )
En este pasaje que
acabamos de leer no se ve nada por lo cual se pueda asegurar que Melquísedec y
Cristo sean la misma persona. El simple hecho de ser sacerdote del Dios Alto no
indica que Melquísedec fuera Jesucristo. No todos los que eran sacerdotes del
Dios Alto iban a ser Jesucristo. Por lo que dice aquí, Melquísedec era
sacerdote, mientras que Jesucristo fue constituido sacerdote cuando él vino a
la cruz.
En el momento en que aparece Melquísedec, Jesús no era aún
sacerdote, lo demuestra el hecho de que la profecía de que tal cosa iba a
ocurrir, se hizo por primera vez en un salmo de David. Si en Salmo 110: 4
el Mesías es nombrado sacerdote según el orden de Melquísedec, es señal de que
Melquísedec lo precedía en ser sacerdote. Es decir, que cuando Melquísedec era
sacerdote, Jesús aún no lo era.
"1
Jehová dijo a mi
Señor: Siéntate a mi diestra, en tanto
que pongo tus enemigos por estrado de tus pies. 2 La vara
de tu fortaleza enviará Jehová desde Sión,
domina en
medio de tus enemigos. 3 Tu pueblo seralo de buena
voluntad
en el día de tu poder, en la hermosura de la
santidad, desde
el seno
de la aurora, tienes tú el rocío de tu juventud. 4 Juró
Jehová, y no se arrepentirá: Tú
eres sacerdote
para siempre
según el orden de Melquísedec. 5 El Señor a tu diestra herirá
a los reyes en el día de su
furor; 6 juzgará
en las gentes,
llenaralas cadáveres; herirá las
cabezas en muchas tierras.
7 Del arroyo beberá en el camino:
Por lo cual levantará
cabeza." ( Sal 110: 1-7
)
Como vemos, en el pasaje
acabado de leer tampoco hay nada que nos haga ver que Jesús era Melquísedec.
Sin embargo sí encontramos allí datos que nos dicen que Melquísedec precedió en
el sacerdocio a Jesús. Si yo digo que "B" va a ser sacerdote
igual que lo fue "A", por lógica, "A" accedió al sacerdocio
antes que "B". Si ya Melquísedec era sacerdote y Jesús no lo era
aún, es lógico pensar que no son la misma persona.
La única vez que Jesucristo se vistió de carne
fue cuando nació de la Virgen María. Antes de esto jamás Jesús estuvo en carne.
En el pasaje que sigue veremos que Melquísedec tenía carne; por lo
tanto era un ser humano. Si Melquísedec tenía carne antes de que Jesús
naciera, es evidente que no son la misma persona.
"5
Así también
Cristo no se glorificó a sí mismo haciéndose
pontífice, mas el que le dijo: Tú eres mi Hijo, Yo te he
engendrado hoy. 6 Como también dice en otro lugar:
Tú eres
sacerdote
eternamente, según el orden de Melquísedec. 7 El
cual en los días de su carne, ofreciendo ruegos y súplicas
con
gran clamor y lágrimas al que le podía librar
de la muerte,
fue oído
por su reverencial miedo. 8 Y aunque era Hijo, por
lo que padeció aprendió la obediencia; 9 y consumado, vino
a ser causa de eterna salud a
todos los que le obedecen;
10 nombrado de Dios pontífice según
el orden de Melquísedec.
11 Del cual tenemos mucho que decir, y dificultoso de
declarar,
por cuanto sois flacos para oír." ( Heb 5:
5-11 )
Tanto en el pasaje
precedente, como tampoco en el pasaje que sigue hay la más mínima pista que nos
haga sospechar que Jesús y Melquísedec son la misma persona. El próximo pasaje
al contrario, nos hace ver de nuevo que Melquísedec era sacerdote cuando aún
Jesús no lo era.
"19
La cual tenemos
como segura y firme ancla del alma,
y que entra hasta dentro del
velo; 20 Donde entró por nosotros
como precursor Jesús, hecho
Pontífice eternalmente según el
orden
de Melquísedec."
( Heb 6:19-20 )
En el nuevo pasaje que vamos
a leer, en el versículo 3, vemos que dice que Melquísedec fue hecho semejante
al Hijo de Dios. Si era semejante a Jesús es porque no era Jesús. No es
lógico que usted y su amigo se paren frente a un hijo suyo y usted en vez de
decirle: "Mira, este es mi hijo" le vaya a decir "Mira, este es
semejante a mi hijo".
"1
Porque este
Melquísedec, rey de Salem, sacerdote del
Dios Altísimo, el cual salió a
recibir a
Abraham que volvía
de la derrota de los reyes, y le
bendijo; 2 al
cual asimismo
dio Abraham los diezmos de todo;
primeramente él se
interpreta Rey de justicia; y
luego también Rey de Salem,
que es,
Rey de paz. 3 Sin
padre, sin madre, sin linaje; que
ni tiene principio de días, ni
fin de vida, mas
hecho
semejante al Hijo de Dios, permanece sacerdote para
siempre".
( Heb 7: 1-3 )
Lo que dice Pablo en el
versículo 3 del pasaje anterior sobre Melquísedec es que su aparición abrupta y
su desaparición abrupta en la historia, lo hace un buen símbolo del sacerdocio
de Jesucristo. No trata él de hacernos ver que Melquísedec no tuvo padre ni
madre, ni esposa ni hijos ni día de nacimiento ni día de muerte; porque todo
ser humano tiene tales cosas, y él, que tenía carne, era un ser humano. Lo que
Pablo dice es que dado que ninguno de esos datos aparecen en su historia,
Melquísedec es un buen símbolo del sacerdocio de Cristo. El hecho de que el
cordero de los sacrificios simbolizaran a Jesucristo no nos hace a nosotros
creer que ese cordero y Cristo eran la misma persona. Igualmente sucede con
Melquísedec.
Para el propósito de Dios, lo único que hacía falta es que
Melquísedec apareciera, tomara los diezmos de Abraham y desapareciera. Por eso
no se registra ningún otro dato de su vida, no es que no tuviera padre, hijos,
día de nacimiento y muerte etc., es que no convenía registrarlos.
Debemos fijarnos también en que en el versículo 6 del
próximo pasaje, se dice refiriéndose a Melquísedec, que su genealogía no
fue contada, es decir, que sí tenía genealogía, pero no fue
contada a fin de asemejarlo a Cristo. Si Melquísedec hubiera sido Cristo,
hubieran dicho que "no tenía genealogía", en vez de decir que
"no fue contada".
"4
Mirad pues cuán
grande fue éste, al cual aun Abraham
el patriarca dio diezmos de los despojos. 5 Y ciertamente
los que de los hijos de Leví toman el
sacerdocio, tienen
mandamiento de tomar del pueblo los diezmos según la ley,
es a saber, de sus hermanos, aunque también hayan salido
de los lomos de Abraham. 6 Mas aquél cuya genealogía no
es
contada de ellos, tomó de Abraham los diezmos, y bendijo
al que tenía las promesas." ( Heb 7: 4-6 )
En el versículo 11 del
pasaje en estudio, veremos reafirmado que Jesús se levantó como sacerdote después
de Melquísedec, y por lo tanto, éste no puede ser aquél. Al decir "otro",
refiriéndose a Cristo, se hace evidente que el sacerdocio de Cristo era
posterior al de Melquísedec.
"Si pues la perfección era por el sacerdocio Levítico
porque debajo de él recibió el pueblo la ley, ¿qué
necesidad
había aún de que se levantase otro
sacerdote según
el orden
de Melquísedec, y que no fuese llamado según
el orden de
Aarón? " (
Heb 7: 11 )
En el versículo 15, al
decir que a semejanza de Melquísedec se levanta Cristo, nos hace ver que
ambos están separados en el tiempo, porque uno tuvo un sacerdocio semejante al
del otro. Y si el sacerdocio del uno es semejante al sacerdocio del otro, es
porque uno tuvo ese sacerdocio antes que el otro, es decir, que no son la misma
persona. También repite en el versículo 17 que el sacerdocio de Cristo era
semejante al de Melquísedec, sobre lo cual podemos hacer el mismo razonamiento
ya hecho.
"14
Porque notorio
es que el Señor nuestro nació de la
tribu de Judá, sobre cuya tribu nada habló Moisés tocante
al sacerdocio. 15 Y aun más manifiesto es, si a semejanza
de
Melquísedec se levanta otro sacerdote, 16 el cual no es hecho
conforme a la ley del mandamiento carnal, sino
según la
virtud de vida indisoluble; 17 pues se da testimonio de él:
Tú eres
sacerdote para siempre, según el orden de
Melquísedec."
( Heb 7: 14 - 17 )
Otra cosa a tener en
cuenta es que si Melquísedec fuera Cristo, en el Nuevo Testamento no se le
llamaría Melquísedec, sino Cristo, por cuanto para entonces se conocía su
nombre. No es lógico pensar que van a seguir llamándole Melquísedec
sabiendo que en realidad era Cristo; al menos expresarían la identidad entre
ambos personajes, si en realidad fueren la misma persona.