Por qué San Pablo prohíbe a las mujeres participar en algunas actividades de la Iglesia.

    Es fácil probar que Pablo prohibía que las mujeres tuvieran posiciones de autoridad o enseñanza en la Iglesia, porque eso él lo dice explícitamente; pero explicar la razón por la cual él ponía ese mandamiento ya no es tan fácil de saber, por cuanto no lo dice manifiestamente. No obstante, más adelante veremos que las mujeres de mayor edad sí podían ejercer ciertas funciones en la iglesia.

    Como antes dije, podemos teorizar, o razonar, o imaginarnos cuales eran las razones que San Pablo tenía para poner tal mandamiento, pero nada hay claramente dicho sobre el asunto. Comencemos pues, por leer esos pasajes en los que San Pablo prohíbe la participación femenina en determinadas actividades de la Iglesia de Cristo.

 

    "Vuestras mujeres callen en las congregaciones; porque no les es permitido hablar, sino que estén sujetas, como también la ley dice. Y si quieren aprender alguna cosa, pregunten en casa a sus maridos; porque deshonesta cosa es hablar una mujer en la congregación."                                                                      ( I Co 14: 34-35 )

 

    "La mujer aprenda en silencio, con toda sujeción. Porque no permito a la mujer enseñarni tomar autoridad sobre el hombre, sino estar en silencio” ( I Tim 2:11-12 )

    De acuerdo a las palabras de San Pablo, la mujer no debe ejercer posiciones de autoridad o enseñanza en la Iglesia. La razón para ello puede ser doble: a) evitar la subversión de la autoridad en el matrimonio, y b) evitar los problemas causados por belleza o atracción sexual de las mujeres jóvenes.

    Si una mujer casada fuera la pastora de la iglesia, o si tuviera alguna posición de autoridad en la misma, tendría también, en forma indirecta, autoridad sobre su esposo. Este parece ser el mensaje que trata de llevar I Tim 2: 12.

    Una segunda razón pudiera ser que las mujeres jóvenes son atractivas, y muchos de los hombres fijarían más su atención en las características físicas de ella que en sus enseñanzas. Esto provocaría celos entre las demás mujeres, que verían que sus esposos se fijaban demasiado en sus hermosas pastoras. En resumen, el tener mujeres en esas posiciones sería, al menos, un factor de distracción, cuando no un factor de divisiones y resentimientos dentro de la Iglesia de Cristo.

    Si leemos Ro 16: 1, veremos que la hermana Febe era diaconisa de la iglesia de Cencreas, lo cual prueba que a las mujeres no se les prohibía ciertas posiciones en la iglesia meramente por el hecho de ser mujeres. ¿Por qué pues, Febe tenía esa posición en la iglesia de Cencreas? Probablemente ella era ya una mujer mayor.

    En I Tim 5: 9 que San Pablo recomendaba a la iglesia no admitir, dentro del círculo íntimo de la iglesia, a viudas menores de 60 años. La razón para esto, según nos dice el apóstol de los gentiles, es que las viudas más jóvenes, después de hacerse licenciosas contra Cristo, quieren casarse, como dice en el versículo 11. Su recomendación para esas viudas jóvenes, era que se volvieran a casar, que tuvieran hijos y que formaran una familia, como dice el versículo 14.

    Lo que Pablo dice en estos pasajes nos da una idea de lo que él tenía en mente respecto a la actuación de las mujeres en la Iglesia. Parece que el no deseaba ninguna mujer joven o atractiva en ninguna posición de la iglesia. Después de los 60, ya una mujer es vista más como una madre o como una hermana, que como una hembra atractiva, por lo tanto, ya podían tener cualquier posición en la iglesia, si es que eran viudas. De no ser viudas, una mujer debía atender a su esposo, sus hijos y su casa. Una mujer mayor de 60 años, que no tenga obligaciones de familia, ni sea de las que todavía quieren lucir "atractivas", es una persona adecuada para el servicio en la Iglesia de Dios.

 

    "9 La viuda sea puesta en clase especial, no menos que de sesenta años, que haya sido esposa de un solo marido. 10 Que tenga testimonio en buenas obras; si crió hijos; si ha ejercitado la hospitalidad; si ha lavado los pies de los santos; si ha socorrido a los afligidos; si ha seguido toda buena obra. 11 Pero viudas más jóvenes no admitas: porque después de hacerse licenciosas contra Cristo, quieren casarse. 12 Condenadas ya, por haber falseado la primera fe. 13 Y aun también se acostumbran a ser ociosas, a andar de casa en casa; y no solamente ociosas, sino también parleras y curiosas, hablando lo que no conviene. 14 Quiero pues, que las que son jóvenes se casen, críen hijos, gobiernen la casa; que ninguna ocasión den al adversario para maldecir." ( I Tim 5: 9-14 )

    Como vemos en este pasaje, Pablo, evidentemente, temía los problemas causados por la atracción sexual de las mujeres jóvenes, y los escándalos que estas cosas acarrean dentro de la iglesia. Por eso es que él les advertía a las iglesias sobre este peligro. Otro consejo que daba Pablo es que las viudas jóvenes se vuelvan a casar, probablemente para evitar problemas sexuales y escándalos dentro de la iglesia, cuando ellas sintieran el duro atractivo de la carne.

    Es razonable, que si Pablo no quería mujeres de menos de 60 años en el círculo interior de la Iglesia, menos aún las querría o las permitiría en posiciones de autoridad o enseñanza, siendo de menos de sesenta años.

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