La falsa predestinación y el
Quinto Mandamiento
Son
muchos los hermanos que han sido enseñados dogmáticamente a creer en la
predestinación estilo janseno-calvinista. Esta predestinación tiene dos o tres
variantes. Una de ellas es que absolutamente todo lo que sucede, desde la caída
de una hoja hasta la muerte de una persona, es hecho directamente por
Dios, y ha sido predestinado en año, mes, día, hora, minuto y segundo. Otra de
las variantes estima que todos los nacimientos y las muertes han sido
predestinados, aunque no las pequeñas cosas; sin embargo, no consideran que
todo lo hace Dios directamente en ese momento, sino que ya lo tiene
predestinado. No obstante, todas las variantes que yo he escuchado coinciden
en decir que el día del nacimiento y el de la muerte de los seres humanos es
algo que ya viene predestinado.
El
quinto mandamiento, tal y como se halla en Ex 20:12 dice:
"Honra a tu padre y a tu madre, porque tus días se alarguen en la tierra que Jehová tu Dios te da."
De
aquí se deduce, sin forzar el razonamiento, que el que honrara padre y
madre, viviría más largamente que si no los honrara. Es decir, que la
longitud de la vida de la persona dependía en parte de su trato con sus padres.
Por lo tanto, la longitud de la vida no estaba inflexiblemente
predeterminada por Dios, sino que había flexibilidad en el asunto. Y muy
importante, es Dios en persona el que nos dio ese mandamiento. Siendo eso así,
es fácil razonar que no existe tal cosa como un día inflexiblemente destinado
para la muerte, o sea, que no hay predestinación para el día de la muerte.
Esto concuerda con lo dicho por Salomón en Ecl 7:17.
"No hagas mal mucho, ni seas insensato: ¿por qué morirás antes de tu tiempo?" ( Ecl 7:17 )
Vemos también en Dt 4:40 que Dios les había dado la tierra, pero que el tiempo
que cada uno de ellos iba a estar sobre esa tierra, dependía de que guardara
los estatutos y mandamientos de Dios, al igual que se ve en I R 3:14. Por lo tanto,
no había un tiempo predestinado para la muerte de cada persona, o para su
estadía en la tierra prometida, sino que dependía de su obediencia en este
caso, además de depender de si honrara o no a sus padres, que es al fin y al
cabo, una manera de guardar los mandamientos y estatutos de Dios.
"Y si anduvieres en mis caminos, guardando mis estatutos y mis mandamientos, como anduvo David tu padre, yo alargaré tus días." ( I R 3:14 )
"Y guarda sus estatutos y sus mandamientos, que yo te mando hoy, para que te vaya bien a ti y a tus hijos después de ti, y prolongues tus días sobre la tierra que Jehová tu Dios te da para siempre." ( Dt 4:40 )
Como
vimos en Ecl 7:17 el día de la muerte no está inflexiblemente predestinado,
porque la persona puede morir antes de tiempo. Es decir, que si por su
vitalidad y salud puede vivir 70 años, si hace mucho mal y es insensato, puede
morir antes de los 70 años.
Otro
tanto se puede decir con lo dicho por Dios a Salomón. Allí Dios le dice personalmente
al rey que si él cumple Sus mandamientos y estatutos, el mismo Dios alargaría
los días de su vida.
También tenemos lo dicho por el sabio Salomón en Prv 3:1-2; 3:16 y 4:10, donde
se manifiesta claramente que en su estructura mental, Salomón tenía el
sólido concepto de que la vida se podía prolongar o aminorar de acuerdo a
ciertas circunstancias.
"1 Hijo mío, no te olvides de mi ley; y tu corazón guarde mis mandamientos, 2 porque largura de días, y años de vida y paz te aumentarán." ( Prv 3:1-2 )
"13 Bienaventurado el hombre que halla la sabiduría, y que obtiene la inteligencia; 14 porque su mercadería es mejor que la mercadería de la plata, y sus frutos más que el oro fino. 15 Más preciosa es que las piedras preciosas; y todo lo que puedes desear, no se puede comparar a ella. 16 Largura de días está en su mano derecha; en su izquierda riquezas y honra." ( Prv 3:13-16 )
"Oye, hijo mío, y recibe mis razones; y se te multiplicarán años de vida." ( Prv 4:10 )
"El príncipe falto de entendimiento multiplicará los agravios; mas el que aborrece la avaricia, prolongará sus días." ( Prv 28:16 )
Estos
pasajes nos dicen que en la estructura mental de Salomón no existía la idea de
un día fijo, inflexible y predestinado para la muerte de las personas. Si
él hubiera pensado tal cosa, no hubiera dado los consejos que da en estos
pasajes. En 3:1-2 le dice a su hijo que si sigue los lineamientos de su padre, tendría
largura de días y que se aumentarían los años de vida. En 3:16 reitera
lo dicho anteriormente, al decir que a la mano derecha de la sabiduría se halla
largura de días, o sea, vida más larga; de lo cual se deduce sin mucho esfuerzo
mental, que si no halla la sabiduría no tendrá largura de días, por lo tanto
no es una fecha fija. Por último, en 4: 10 le dijo a su hijo que si recibía
sus razones, se le multiplicarán años de vida. Es decir, que nos vuelve
a hacer ver que en su estructura mental no existía la idea de un día prefijado
para la muerte, lo cual nos indica a su vez que él no creía en la
predestinación.
Algo
semejante se ve en muchos otros pasajes, como por ejemplo en Dn 4:27 donde Daniel
evidencia que no creía que todas las cosas estuvieran predestinadas, pues
acoge la probabilidad de que Nabucodonosor, si seguía su consejo, podía
prolongar su tranquilidad. De ahí se deduce que el tiempo que iba a durar
la tranquilidad de este rey no estaba predestinado, sino que dependía de lo que
él hiciera.
"Por tanto, oh rey, aprueba mi consejo, y redime tus pecados con justicia, y tus iniquidades con misericordias para con los pobres; que tal vez será eso una prolongación de tu tranquilidad." ( Dn 4:27 )
También Moisés, que sabía más de doctrinas que todos los intérpretes de la
Biblia, nos hace ver varias veces que él no creía en que todas las cosas
estuvieran predestinadas, ni que todo tuviera que acontecer a fecha fija.
"Para que temas a Jehová tu Dios, guardando todos sus estatutos y sus mandamientos que yo te mando, tú, y tu hijo, y el hijo de tu hijo, todos los días de tu vida, y que tus días sean prolongados." ( Dt 6:2 )
"Y para que os sean prolongados los días sobre la tierra, que juró Jehová a vuestros padres había de dar a ellos y a su simiente, tierra que fluye leche y miel." ( Dt 11:9 )
"Para que no se eleve su corazón sobre sus hermanos, ni se aparte del mandamiento a diestra ni a siniestra, a fin que prolongue sus días en su reino, él y sus hijos, en medio de Israel." ( Dt 17:20 )
"Dejarás ir a la madre, y tomarás los pollos para ti; para que te vaya bien, y prolongues tus días." ( Dt 22: 7 )
"Pesas cumplidas y justas tendrás; efa cabal y justo tendrás, para que tus días sean prolongados sobre la tierra que Jehová tu Dios te da." ( Dt 25:15 )
"Mas si tu corazón se apartare, y no oyeres, y fueres incitado, y te inclinares a dioses ajenos, y los sirvieres; os protesto hoy que de cierto pereceréis, no tendréis largos días sobre la tierra, para ir a la cual pasas el Jordán para poseerla." ( Dt 30:17-18 )
"Porque no os es cosa vana, mas es vuestra vida; y por ellas haréis prolongar los días sobre la tierra, para poseer la cual pasáis el Jordán" ( Dt 32: 47 )
En
todos estos ejemplos hemos visto que personajes de inobjetable autoridad para
decirlo, nos hacen ver que no hay un día fijo predestinado para todo y que
ellos no creían en la predestinación. Puede haber algunos acontecimientos que
Dios predestine que ocurran en una fecha determinada, como fue el caso de la crucifixión,
que tenía que ocurrir el día que se mataba la pascua, pero eso no quiere decir
que todo está predestinado.
En
el pasaje siguiente vemos que el día de la muerte de Ezequías no estaba
predestinado, porque después de la oración de este rey, se le pospuso la
muerte otros quince años. Si hubiera estado predestinada su muerte para la
época en que Isaías anunció su fallecimiento, no se hubiera cambiado para
quince años después; y si hubiera sido predestinada su muerte para quince años
después, no se le hubiera anunciado la muerte a Ezequías para cuando lo anunció
Isaías, porque eso hubiera sido decir una mentira.
"1 En aquellos días cayó Ezequías enfermo para morir. Y vino a él Isaías profeta, hijo de Amos, y le dijo: Jehová dice así: Ordena tu casa, porque tú morirás, y no vivirás. 2 Entonces volvió Ezequías su rostro a la pared, e hizo oración a Jehová. 3 Y dijo: Oh Jehová, te ruego que te acuerdes ahora que he andado delante de ti en verdad y con íntegro corazón, y que he hecho lo que ha sido agradable delante de tus ojos. Y lloró Ezequías con gran lloro. 4 Entonces fue palabra de Jehová a Isaías, diciendo: 5 Ve, y di a Ezequías: Jehová Dios de David tu padre dice así: Tu oración he oído, y visto tus lágrimas: he aquí que yo añado a tus días quince años." ( Isa 38:1-5 )
Pudiera alguien alegar que la muerte estaba predestinada para cuando Isaías la
anunció primeramente, pero que luego Dios cambió esa predestinación y la
predestinó para 15 años más tarde. En ese caso, esa persona esta recurriendo a
un eufemismo ( cosa muy común en religión ) llamándole predestinación a lo que
no es predestinación, puesto que la predestinación es inmutable. Y si la
predestinación de los que creen en tal cosa no es inmutable, entonces tampoco
lo sería la predestinación de los que van ser salvos.
En
realidad los que dicen creer en la predestinación no creen tal cosa. Ellos
se autosugestionan y dicen que creen, pero en realidad no creen. Los
predestinacionistas dicen creer que tanto la hora de la muerte como la del
nacimiento están predestinadas. Sin embargo van al médico a curarse,
pudiendo dejarlo todo a lo que Dios haya predestinado. Si Dios predestinó su
muerte para un día, aunque él vaya al mejor médico del mundo, morirá ese día;
¿para qué gastar en médicos?
Lo
mismo ocurre con el día del nacimiento, todos dicen creer que está
predestinado, pero todos usan métodos anticonceptivos para no tener un hijo
cada nueve meses. Si ellos creyeran verdaderamente en la predestinación no
usarían métodos anticonceptivos, porque al fin y al cabo lo que iba a pasar ya
estaba escrito. Si iba a nacer un niño, vendría aunque él usara el mejor de
todos los métodos anticonceptivos. Tampoco pagarían seguros, porque lo que iba
a suceder, estaba predestinado. Si estaba predestinado que chocara y se quedara
sin carro, se iba a quedar sin carro de todas maneras, aunque tuviera seguro; y
si estaba predestinado que no se quedara sin carro, pues aunque no tuviera
seguro, no se iba a quedar sin carro, y así sucesivamente. Tampoco cuidarían su
cartera, porque si estaba predestinado que le robaran el dinero, se lo iban a
robar aunque ellos lo cuidaran. Como ustedes ven, la realidad es que nadie
cree realmente en la predestinación, aunque algunos, honestamente, se figuran
que creen.